FALLECE EL GANADERO NAVARRO JOSÉ CRUZ PAGOLA, A LOS 60 AÑOS DE EDAD

Tras permanecer quince años como mayoral de Macua, estableció hace cinco años en Rada su propia vacada de bravo con el nombre de El Sabinar.

El ganadero navarro José Cruz Pagola Monente falleció el sábado a los sesenta años de edad, tras no superar una larga enfermedad, un cáncer de pulmón. “Pagola”, como así se le conocía en el entorno taurino, desde niño sintió afición por el mundo del toro bravo. Cuando Ángel Macua llevó las vacas a pastar a Caparroso, primero al Sotillo y después a Hierbavacas, se fue acercando a él y acabaron haciendo amistad. De este modo, a los 16 años comenzó a moverse entre las vacas de la tierra y así fue adquiriendo amplios conocimientos en cuanto a su comportamiento, manejo y crianza.

Jesús Sádaba, José Pagola, el transportista Adrián y Jesús Macua
en el patio de caballos de Pamplona en 2008.
Fotografía: Cecilio Vierge.

Macua le encargaba portes de ganado con el camión que el joven poseía y después trabajó para él como empleado. Se dedicó a la ganadería, a conducir su camión y a traer y llevar todas las reses que había que mover. Las encerraba, embarcaba, transportaba hasta el destino y desembarcaba.

Más tarde, con el hijo del citado ganadero, con Jesús Macua, cuando éste se hizo cargo de la ganadería, continuó realizando las mismas funciones. Con el tiempo, tuvo que ir muchas veces a Andalucía a traer corridas de toros, lo que le permitió conocer numerosas ganaderías y mayorales. Y así, como mayoral de la vacada de bravo de Larraga, permaneció quince años, hasta que el pamplonés Jesús Primo tomó su relevo.

Natural de Caparroso, su sueño de ser ganadero bravo lo vio materializado hace cinco años, en 2008, tras comprar en la zaragozana Luna la vacada de Colón, reses bravas procedentes de Arnillas, La Bomba y algo de Cuartero; es decir, ganado de Casta Navarra.

Dos años después, en la finca El Chaparral de Rada, cuartel general de su ganadería, llamada El Sabinar, llevó a cabo el primer tentadero con caballo de sus reses. La lidia de seis ejemplares corrió a cargo del varilarguero tudelano Juan Manuel Sangüesa, que dejó buena muestra de su experimentado oficio, y de los novilleros Imanol Sánchez, José Arévalo y Javier Antón. Y la prueba resultó más que positiva. “Estoy muy contento. Ni siquiera yo pensaba que el ganado iba a ofrecer tan bueno juego en general, aunque también es cierto que mi semental Tablero me está dando estupendos productos”, declaraba tras la tienta.

A partir de ahí, el ganado de El Sabinar estuvo presente en la calles de muchos pueblos de Navarra y de otras de comunidades colindantes durante sus respectivas fiestas patronales.

Sin embargo, debido a su situación, se vio obligado a vender la ganadería hace un par de meses. Y lo hizo a los hermanos Ustárroz, criadores de bravo de Arguedas, en un pacto entre navarros, como siempre se sintió Pagola, ganadero y navarro.

FUENTE: www.torosennavarra.com